Como nube arrastrada por el viento como el oasis que se divisa en el desierto como atajos que surgen en la montaña, cuando se cruzan los caminos. 
Como la luz de los primeros rayos solares, como la última página de un libro, como el último poema escrito. Cuando se cruzan los caminos. 
Como árbol que crece digno, imperturbable como la luz del faro guiando los barcos a la deriva, como los encuentros inesperados de dos viejos amigos. Cuando se cruzan los caminos, y se van formando las visiones de los sueños,  los monstruos de las pesadillas van cobrando vida, y se formando los cimientos del destino, y van apareciendo relámpagos de energía en tu maltratado cuerpo. Cuando se cruzan los caminos, como cadena que ata al preso, como reglas de juego solo para romperlas como disciplina férrea para conservar tu libertad como maravillosa anarquía de pensamientos. 
Cuando se cruzan los caminos. Caer, levantarse,  volver a caer, volver a levantarse palabras escondidas en el corazón, palabras perdidas besos robados, baile de navajas  en cualquier callejón. Cuando se cruzan los caminos, estas cansado,  pero la fuerza ya no proviene de ti, una mano invisible te empuja a seguir, 
 sigues la corriente del rio,   no puedes confiar en la suerte porque sabes que ya todo esta escrito, la línea del horizonte es tu meta  que nunca podrás alcanzar, la música y las drogas son y serán tus compañeros de viaje. Cuando se cruzan los caminos, viajas a través de la niebla,  
entre silencios y oscuridades entonces, la angustia,  la ansiedad,  el amor,  el odio,  las ambiciones,  el sufrimiento,  la idolatría,  la sumisión,  el orden ,  las reglas,  las leyes,  los deseos  desparecen de tu mente  cuando se cruzan los caminos.